El vuelo comenzó el día en que fue a comprar una motocicleta y vio una revista de parapente en la tienda. Los chicos de la tienda estaban tomando un curso de parapente y le preguntaron a Goyo si quería participar. Al principio Goyo pensaba que la formación estaba a la par con los astronautas. Pero cuando fue, el sábado siguiente, lo fácil que era para los chicos, se inscribió y ha estado volando desde entonces.